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Claudia

¿Por qué pierde pelo mi peluca ? Causas y soluciones Chiara Cabello

Usamos peluca de fibra sintética o cabello natural para cambiar de look, disimular la caída del cabello, recuperar la confianza o proteger nuestro cabello natural. En ocasiones, cuando cepillamos la peluca o la sacamos de la caja, encontramos algunos mechones de cabello enredados en el peine o simplemente sueltos. Es posible que te preguntes si hay algún problema con tu peluca. En este blog de Chiara Cabello exploraremos las razones por las se le puede estar cayendo el cabello a tu peluca de fibra sintética o de cabello natural y cómo podemos prevenir y reducir un deterioro sin vuelta, con el cuidado y el mantenimiento adecuado.


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La muda de la peluca es normal. Al igual que se desprende nuestro cabello biológico, el cabello de la peluca también tiende a caerse. Solo debes preocuparte si se trata de una caída excesiva en la que salen puñados de cabello a la vez.


Razones por las que tu peluca pierde cabello:


1. Peluca nueva a estrenar

Cuando sacas la peluca de la caja por primera vez, es normal que pierda cabello. El cabello está insertado de forma estratégica para proteger la peluca de la fricción dentro de la caja. Es por eso que indicamos que limpies sin miedo el exceso de esas fibras con un peine de púas anchas o simplemente usando tus dedos como peine. Puede salir bastante cantidad. Sólo debes preocuparte si ves que la peluca empieza a tener calvas.


2. Desgaste natural de tu peluca

Todas las pelucas, tanto sintéticas como de cabello natural, experimentan un desgaste con el tiempo. Con el cuidado adecuado, las pelucas sintéticas duran de 4 a 6 meses, mientras que las pelucas de cabello humano entre un año y año y medio.

Al igual que el cabello natural, las fibras de una peluca están sujetas a fricción, lo que puede llevar a la caída de mechones. Este desgaste se acelera especialmente en las zonas de mayor contacto, como la nuca o la parte superior de la cabeza.

Solución: Para minimizar el desgaste, alterna entre varias pelucas si es posible y asegúrate de darle el descanso necesario. Además, un mantenimiento regular con los productos específicos para cada tipo de fibra, puede ayudar a prolongar su vida útil. No obstante si tu peluca ha pasado su "fecha de vencimiento", puede ser el momento de reemplazarla.


3. Calidad de tu peluca sintética o de cabello natural

La calidad de la peluca juega un papel crucial en su durabilidad. En el mercado hay mucha opción de pelucas que pueden estar confeccionadas con materiales de baja calidad, lo que puede hacer que las fibras se desprendan con mayor facilidad.

Las pelucas más baratas suelen estar fabricadas con materiales de baja calidad, como fibras sintéticas más económicas o cabello humano recolectado de forma poco amable. El resultado en las pelucas de fibra sintética son pelucas poco naturales y con el aspecto de "pelo de muñeca". En las de cabello humano, son pelucas con muy baja calidad, tendentes al enredo, secas, quebradizas, difíciles de manejar y de mal aspecto. En ambos casos las gorras pueden ser muy incómodas y producir picores, además de empezar a perder mechones desde el primer uso.

Solución: Busca siempre piezas confeccionadas con materiales de buena calidad, como fibras sintéticas de última generación o cabello humano calidad Remy. Estos materiales proporcionan un aspecto más natural y duradero. En Chiara Cabello buscamos una buena relación calidad precio, trabajamos con marcas de prestigio que ofrecen siempre materiales homologados con garantía de calidad a un precio ajustado. 


4. Problemas en la base de la peluca

La base de la peluca, especialmente si es de encaje o monofilamento, suele desgastarse con el tiempo, lo que hará que las fibras se suelten.

El daño más común en las pelucas con tul frontal es la manipulación incorrecta a la hora de colocarla. Es una zona sensible que se puede romper con facilidad y perder los pelos insertados inmediatamente a continuación en la zona del monofilamento. Recomendamos siempre colocar la peluca cogiéndola de la nuca y nunca recolocar o estirar por la zona del encaje frontal.



En el caso de las pelucas de monofilamento superior los nudos son insertados a mano, el roce es directo con el cuero cabelludo y los nudos se pueden ir desprendiendo con el tiempo, llevando a la pérdida de cabello.

En el mercado existe una construcción de doble monofilamento donde los nudos quedan escondidos entre las dos capas de monofilamento. El movimiento es mejor que con otras confecciones y mover la raya donde nos apetezca es mucho más sencillo sin que el pelo quede levantado desde la raíz. Al llevar los nudos del pelo escondidos, no quedan directamente sobre la cabeza, por lo que la peluca es mucho más resistente evitando que los nudos se deshagan y el cabello se desprenda.

 Por otro lado es más suave y confortable, por lo que la experiencia de utilizar este tipo de cascos es mucho más satisfactoria, se puede llevar todo el día sin incomodidades.



Solución: Si notas que la base de tu peluca está dañada, considera repararla o reforzarla con la ayuda de un profesional. En algunos casos, te puede salir más rentable directamente reemplazar la peluca que intentar repararla.


5. Cuidado y mantenimiento inadecuado de tu peluca

El cuidado inadecuado es una de las causas más comunes de la muda en las pelucas. Peinar la peluca de forma agresiva, lavarla con productos no adecuados o exponerla a demasiado calor puede dañar tanto a las fibras como a la base de la peluca, haciendo que el cabello se desprenda.

Solución: Sigue las instrucciones de cuidado específicas para tu peluca. Lava y acondiciona tu pieza cada 6-8 usos (o antes si lo ves necesario). El lavado diario puede eliminar los aceites naturales y debilitar las fibras de la peluca, haciéndola más susceptible a la muda.

Usa productos diseñados para pelucas sintéticas o de cabello natural, según el tipo que tengas, y evita el uso de herramientas de calor a menos que la peluca sea resistente al calor.

En el caso de las pelucas de fibra resistente a calor es importante usar herramientas de calor regulables en temperatura ( máx. 130ºC en pelucas sintéticas; máx. 170ºC en pelucas naturales) y usar los productos de cuidados indicados según el proveedor para no dañarlas de forma permanente.


6. Manipulación excesiva e inadecuada de tu peluca

El cepillado o peinado excesivo, especialmente en mojado, puede causar la caída del cabello. Esto es especialmente importante para las pelucas sintéticas, que son más susceptibles al daño por manipulación. Peinar el cabello con demasiada fuerza y cepillarlo de arriba hacia abajo puede tirar de los nudos, causando mechones sueltos y enredos.

Solución: Desenreda y cepilla tu peluca con suavidad, asegurándote de empezar por las puntas e ir subiendo, preferiblemente cuando esté seca, usando un peine de púas anchas o un cepillo diseñado para pelucas.

Lleva un peine siempre en el bolso y peina tu peluca suavemente de forma continua, evitarás que se creen nudos y enredos difíciles de manejar.


7. Condiciones ambientales a la hora de cuidar tu peluca

Las condiciones ambientales, como la exposición al sol, el viento y la humedad, también pueden afectar la integridad del cabello de la peluca. Estos factores pueden hacer que las fibras se sequen y se vuelvan quebradizas, lo que contribuye a la muda.

Solución: Protege tu peluca de la exposición prolongada al sol y a otros elementos ambientales. Hidrátala de forma constante con el sérum siempre de medios a puntas.

Usar tanto el acondicionador o el serum en las raíces o la zona del monofilamento puede aflojar los nudos y aumenten la caída de los mechones, por lo que asegúrate de aplicarlos de medios a puntas.

Almacénala en un lugar fresco y seco, preferiblemente en un soporte para pelucas que sea más pequeño que el casco de la peluca, en su propia caja o bolsa de un tejido natural cuando no la estés usando.


8. Ajuste incorrecto de tu peluca

Una peluca que no se ajusta correctamente puede causar fricción adicional en ciertas áreas, lo que lleva a una mayor pérdida de cabello. Lo mismo puede ocurrir con un ajuste muy apretado al recogértela, tirando demasiado de las fibras.

Solución: Asegúrate de que tu peluca tenga el tamaño y ajuste adecuados para tu cabeza para que abrace la cabeza sin apretar y se quede en su sitio sin necesidad de nada más siendo muy cómoda. Te dejo como medirte de forma correcta.



Al hacerte un peinado con tu peluca habitual, opta por estilos sueltos, de esa forma se verá también más natural y evitarás castigarla en exceso.


Como reflexión final

Si bien es natural que las pelucas experimenten algo de "muda" con el tiempo, cuidar adecuadamente tu peluca puede reducir significativamente este problema. Invertir en una peluca de buena calidad, seguir un régimen de cuidado adecuado y manejarla con amor puede hacer una gran diferencia en su durabilidad. Recuerda que la forma en que cuides tu peluca determinará en gran medida cuánto tiempo podrás disfrutarla en su mejor estado.


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